Desde que tengo uso de razón, mi vida siempre ha estado rodeada de libros. Ahora son más moldes que libros pero antes no era así jajaja. Leía en todas mis horas libres. Entonces no existían los ordenadores, ni whatsapp, ni internet, ni los blogs, ni Apalabrados… En las casas solo había una tele y, o mirabas lo que miraban los mayores, o acababas asqueada dando vueltas por casa. Un verano leí más libros de los que leeré nunca. No todos los entendía pero yo lo intentaba. Para mí siempre ha sido desconectar del mundo real, viajar a otro mundo y meterme en otras vidas que nunca podré vivir por mí misma. He reído, he llorado, he viajado, he sentido cosas que nunca sentiré, he aprendido que hay cosas que podrían ser y otras que no serán. Pero siempre los libros me han aportado algo a mi vida.
Hace unos días me di cuenta que cada día leo menos. Lo de pasarme ratitos leyendo durante el día ha pasado a ser un ratito corto por la noche y, a veces, no más de dos páginas. Y he pensado que se acabó, que tengo que volver a leer. Dejar cosas que hago y que no me aportan nada y sustituirlas por la lectura de nuevo.
Una de mis grandes ilusiones, ahora que me he metido de lleno en la cocina, es poder cocinar con algún cocinero bueno o bien poder ir a su restaurante (pero de los buenos buenos, ya estoy harta de comida rápida y sitios que ni siquiera alimentan). Pero he soñado años y años con cenar con un escritor, que me cuente que se le pasó por la cabeza el día que empezó a escribir uno de sus libros. Quizás será un clásico para mucha gente pero con Paul Auster me conformaría 🙂
Sant Jordi quizás suene muy comercial para muchos, pero creo que cada año se gana un alma en el mundo de la lectura, así que bienvenida sea esta fiesta. Huyo de libros que son best-sellers que nos quieren obligar a leer, pero leo de todo, por qué considero que en cualquier rincón puede haber una buena historia. Aunque ahora que he leído tantísimo tengo ganas de recomendar libros y escritores de siempre. Pero no tengo la verdad absoluta, cada persona tiene sus libros y autores, solo hace falta encontrarlos.
Mis 5 preferidos a día de hoy, mañana a saber…
- “El libro de las ilusiones” de Paul Auster
- “Crimen y castigo” de Fiódor Dostoievski
- “Quisiera que alguien me esperara en algún lugar” de Anna Gavalda
- “It” de Stephen King
- “Olive Kitteridge” de Elizabeth Strout
No son negociables los de: PAUL AUSTER, STEPHEN KING, ANA GABALDA, KAFKA (La metamorfosis), ISABEL-CLARA SIMÓ, AGATHA CHRISTIE y muchos otros que podéis encontrar >> aquí.
Y de autores más noveles que he tenido la suerte de conocer hace poco recomendaría:
- “Cosas que ocurren aunque tú no las veas” de Alicia Huerta
- “Dos dies a Barcelona” de Caterina Cortés Palmer (en catalán)
- “El viaje de Pau” de Benjamín Recacha
- Y como no, nuestro libro solidario: 365 contes
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Espero que si no pasa nada el miércoles pueda perderme por Barcelona, que aunque es demasiado para mí es dónde quiero estar. Aunque sea una fiesta muy comercial y de famoseo no siempre merecido, en el corazón de mucha gente está la pasión por la lectura 🙂
Dibujo encontrado en Facebook.
Paul Auster es mi escritor favorito. Mi sueño es llegar a escribir alguna vez con la facilidad que él lo hace para transmitir sensaciones. Me fascina su capacidad para comunicar a través de un lenguaje sencillo, sin adornos ni ostentación. ‘El libro de las ilusiones’ me gustó, pero mi preferido y que incluyo en mi Top 3 de lecturas de siempre es ‘Locuras de Brooklyn’.
Como tú, también recomiendo ‘It’. Me atrapó durante un verano y lo devoré con ansia, jajaja!
Ah, y muchísimas gracias por recomendar mi novela. Estaré encantadísimo de firmar todas las dedicatorias que haga falta. 🙂
Un abrazo!
Benjamín, para la cena está antes conmigo lo siento jajaja. Bueno ese fue el que me enganchó mucho por varias circunstancias, pero el de «Bogeries de Brooklyn» también y otros más. Eso es como tener varios hijos y no saber a quién se quiere más jajaja.
El de It me dan ganas de volverlo a leer, quizás en verano 🙂
Que vaya muy bien en Sant Jordi, yo estoy barajando posibilidades de ir o no.. ais dichoso cansancio 🙂
Cuando vivía en Madrid, mi mejor momento del día, era en el metro, porque sacaba mi libro y me sumergía en un montón de historias. Qué tiempos, nunca pensé que pudiera echar de menos el Metro 😉
http://tarragonain.blogspot.com.es
Maria, no todo es malo en las grandes ciudades, con la excusa de ir mucho en metro cuando buscaba piso me leí varios libros la verdad 🙂